¿Cuál es el valor de una pintura antigua?
Para averiguar el valor de una pintura antigua, es necesario primero expertizarla y luego valorarla.
Expertizar implica determinar la época, escuela, posible autoría y autenticidad del cuadro mediante estudios históricos y pruebas técnicas.
Valorar es determinar su valor económico, lo cual depende de la expertización previa, ya que su precio depende en gran medida de los resultados de la autentificación.
Al heredar una pintura antigua, consultamos a un experto para autentificarla y determinar su valor económico. Si se confirma que es de un pintor reconocido usamos catálogos de subastas para estimar su valor. Sin embargo, el precio final puede variar según las fluctuaciones del mercado y las reglas de oferta y demanda.
La cotización de un cuadro
Según parece un cuadro de mayor calidad artística debería tener un precio más elevado. No obstante, otros factores suelen influir en su precio, a veces incluso más que la calidad en sí misma:
- Los cuadros de pintores conocidos y cotizados tienen mayor valor.
- Las obras firmadas se venden mejor que las anónimas. La fama del autor, datos sobre su vida, referencias en subastas y presencia en museos aumentan su valor.
- Los pintores locales se venden mejor en la tierra natal del pintor o donde desarrolló su carrera.
- Cuanto más atractivo es el tema, más fácil resulta vender el cuadro. Incluso dentro de la obra de un mismo pintor, los precios pueden fluctuar considerablemente según el tema.
- En cuanto al tamaño de un cuadro, debería decirse que cuanto más grande, mayor debería ser su valor, aunque existen excepciones. Los cuadros de gran tamaño son difíciles de vender debido a que las casas modernas son más pequeñas y tienen menos espacio en las paredes. En cambio, las obras de tamaño medio o pequeño son más fáciles de ubicar y se venden mejor.
- El estado de un cuadro es mejor cuanto menos restaurado esté, ya que en el pasado muchas restauraciones alteraban significativamente su aspecto original. Por ello, se valora más que una obra conserve su estado primitivo con mínimas intervenciones.
